sábado 21 de agosto de 2010

Desde Colombia, Encuentro Internacional de Mujeres y Pueblos de las Américas Contra la Militarizacion



Delegación Hondureña desde Colombia. Encuentro Internacional de mujeres y
pueblos de las Américas contra la militarización. 16 al 23 de agosto del
2010.



Colombia es la siguiente parada en la ruta de lucha de los movimientos de
mujeres y pueblos contra la militarización. En una continuidad de
intenciones del II Encuentro Hemisférico realizado en La Esperanza,
Intibucá, Honduras, en octubre del 2008, y del I que tuvo como sede Chiapas,
México, en agosto del 2003. Hoy, la sede de esta acción colectiva es
Barrancabermeja, zona caliente en clima y tensión política, cuna del
paramilitarismo y la resistencia popular, donde las organizaciones
convocantes, nacionales y en redes internacionales, han hecho los esfuerzos
para que cientos de participantes, prioritariamente mujeres, se hagan
presente con cuerpos y propuestas por la justicia y la paz.

El encuentro pretende propiciar un espacio para compartir y denunciar,
visibilizar efectos de la militarización y valorar las resistencias
colectivas. Se pretende que colectivamente sigamos dándole continuidad a las
estrategias coordinadas en los distintos encuentros para la defensa de
territorios y de cara a la militarización creciente en la región
latinoamericana.

Hoy, la arremetida norteamericana por controlar el territorio y detener los
avances progresistas de los pueblos de la región y en expresión de la crisis
profunda del capitalismo, ha incrementado la militarización y el
intervencionismo. Como resultado se incrementan las bases militares en
Colombia y Honduras; hay una ocupación militar norteamerica en Haití, y se
han movilizado efectivos y armas en Costa Rica, y se incrementan por
distintos medios la amenaza constante sobre el pueblo venezolano; en ese
marco también se explican los actos lesivos a los pueblos como el golpe de
estado en Honduras.

Desde esa realidad y con esa conciencia, la delegación hondureña junto con
otras, llegamos a la ciudad de Bogotá, el encuentro inicia con los rostros
de compañeras y compañeros que nos esperan y nos reciben. La bienvenida es
la reunión inicial donde nos indican elementos de coordinación y nos
informan sobre el contexto actual del país. Desde ahí se conforman las
delegaciones o misiones humanitarias, como le llaman las organizadoras y
organizadores del evento. Nos desplazamos hacia zonas distintas del país
donde pudimos vivir y constatar junto a quiénes nos recibieron, la
vinculación de este proceso de creciente militarización con la defensa de
la riqueza e intereses de las transnacionales que explotan al pueblo
colombiano, a través de empresas petroleras, mineras, privatizadoras del
agua.

Desde las visitas en las regiones nos hemos enriquecido y conmovido con la
realidad colombiana. Nos hemos hermanado con las comidas, las sonrisas, los
abrazos y palabras de mujeres y hombres en lucha. Escuchamos y conocimos
casos emblemáticos de los efectos de la “seguridad democrática” que exportan
desde el gobierno al resto de nuestros países. Y de manera extraordinaria
nos alimentamos del entusiasmo y la esperanza con la que los movimientos
sociales, en medio de la más cruenta violencia y sistemática represión,
siguen construyendo propuestas y modos de vida alternativa al neoliberalismo
patriarcal y racista.

En la discusión del encuentro hemos visto con entusiasmo como se ha
avanzado en la discusión y reflexión del entendimiento de este proceso de
militarización en los ámbitos de la cultura, la educación, la religiosidad,
la estética y todos los aspectos de la vida cotidiana, teniendo como eje el
impacto de la militarización en los cuerpos de las mujeres, y sus
experiencias vitales, así como sus resistencias y propuestas de lucha.

Como hondureños y hondureñas hemos compartido nuestras experiencias modestas
e importantes desde nuestra realidad y sabiduría; nos han preguntado y
solidarizado con la lucha de resistencia histórica y actual y nos hemos
llenado del conocimiento de este pueblo colombiano que resiste proponiendo y
viviendo cada día con valor colectivo.


DELEGACIÒN HONDUREÑA: COPINH-COMPA, INHESCO, COFADEH, FEMINISTAS EN
RESISTENCIA, organizaciones miembras del FRENTE NACIONAL DE RESISTENCIA
POPULAR DE HONDURAS.