El pasado lunes 17 de mayo, visitó Honduras el general Douglas Fraser, jefe del Comando Sur de los Estados Unidos, con el supuesto propósito de "restablecer" la cooperación militar con nuestro país.
El militar se reunió con miembros del actual régimen de Pepe Lobo y la Junta de Comandantes de las Fuerzas Armadas. El menú de las conversaciones incluyó la supuesta lucha contra el narcotráfico, proyectos de asistencia "humanitaria" y la reacción a los desastres naturales.
Es interesante como el Comando Sur se refiere al "restablecimiento" de la cooperación militar, cuando ciertamente Estados Unidos nunca abandonó el uso del país como sede de una de sus bases militares, la que fue utilizada como ruta en la expulsión del país al expresidente Manuel Zelaya. Al mismo tiempo que la dupleta Obama-Clinton no pasó más allá de titubear en cuanto a asumir una posición de condena al golpe de estado.
Los Hondureños – fuera de la elite dominante y sus vasallos- tenemos bastante claro el papel que jugo la ultraderecha de ese país en inducir el golpe de estado, al mismo tiempo que los asesores jurídicos y amigos de la Sra. Clinton prestaron sus servicios para cabildear en Washington a favor del gorilato.
La posición ambigua de la administración Obama respecto a Honduras contrasta con la rápida condena del golpe de Estado efectuado en Madagascar en marzo del 2009, cuando la secretaria Clinton no vaciló en repetidas ocasiones en señalar la irrupción constitucional en ese país.
El general Fraser en una declaración ante el Comité de las Fuerzas Armadas del Senado de los Estados Unidos (1), efectuado el pasado 11 de marzo señalo que: “Las Américas, el hogar que compartimos, es estratégicamente vital, rico en cultura, y una región ampliamente diversa y vibrante. Desde que asumí el mando hace nueve meses, he viajado extensamente por toda la región y he sido testigo de los desafíos regionales que enfrentan líderes y sus pueblos. También he aprendido que muchos de estos retos son compartidos por todos nosotros. A pesar de que nuestras naciones a veces pueden estar en desacuerdo sobre asuntos políticos y económicos, estamos unidos por una opinión común de que podemos solucionar nuestros problemas a través de acuerdos negociados. Este punto de vista proporciona la clave para la seguridad de nuestros ciudadanos y requiere una firme dedicación a la protección de nuestras libertades fundamentales y la defensa de nuestro compromiso común de mantener la democracia y el Estado de Derecho".
Ahora bien, nos preguntarnos qué es para el General Fraser el concepto de Democracia y Estado de Derecho? Honduras padeció el año pasado un golpe de estado clásico, perpetrado por los militares, contando con el acompañamiento del poder judicial y del legislativo; a partir de esa fecha se inició un deterioro vertiginosos en materia de derechos humanos. No obstante a pesar del maquillaje, es conocido por todos los hondureños que el poder detrás del trono continua siendo los militares, en los que perisiste una obediencia ciega a la cadena de mando que se origina en el Comando Sur.
En la misma intervención ante el Comité de las Fuerzas Armadas del Senado presidido por John Sidney McCain, Fraser sólo menciono en una ocasión a Honduras y fue en relación al narcotráfico, soslayando cualquier mención del desastre en que ha sido sumido el país, en materia de derechos humanos y nuestra incipiente economía.
Es interesante señalar como el General Fraser en esa misma declaración ante el Senado, respondío a McCain sobre la supuesta conexión entre la FARC y el gobierno de Venezuela. Fraser señaló que la relación era inexistente. Posteriormente el General recibió una reprimenda del Subsecretario de Estado Andrés Valenzuela, declarando un día después a lo medios sobre las evidentes conexiones entre Chávez y la guerrilla colombiana, retráctandose de esta forma de las declaraciones del 11 de marzo (2).
Mientras tanto la asesoría en guerra sucia y falsos positivos que brinda Alvaro Uribe a la Secretaría de Seguridad en Honduras viene incrementando el estado de descomposición social que prevalece en el país. La violencia se ha instaurado como parte de una estrategia de sometimiento que rinde sus réditos al imperio.
Los fondos de la Iniciativa Merida y los del CARSI (Iniciativa Centroamericana de Seguridad) parece ser que son destinados más para crear estados fallidos que utilizados en la supuesta lucha contra el narcotráfico y las pandillas. Décadas después de iniciada la lucha contra el narcotráfico, el negocio prolifera cada día más, siendo los socios del norte quienes proveen los precursores químicos, las armas y el lavado de activos. En lo que se refiere a América Latina producimos la materia prima, los muertos, y últimamente nos estamos incorporando al consumo. En otras palabras participamos en la moda neoliberal del outsourcing (subcontratación) y por supuesto en estas condiciones surgen los inevitables narcoestados.
El deterioro de los derechos humanos que se viene dando en Honduras no es preocupación alguna para Fraser, el Comando Sur y la administración Obama, Todo lo contrario, al restablecer abiertamente la asistencia militar es posible que vengan técnicos en interrogación que se han formado en la base estadounidense de Guantánamo,y nada raro que en el futuro los desaparecidos en Honduras hagan una escala técnica en la Base de Palmerola, tal como sucedió con Manuel Zelaya en su ruta de expulsiòn hacia Costa Rica, pero ahora no sera para rebastecer combustible de vuelo, sino para que conozca el pueblo hondureño las virtudes del waterborading (el submarino) en que son tan duchos las tropas de nuestros "aliados" .
La Ceiba 20 de Mayo del 2010
Organización Fraternal Negra Hondureña, OFRANEH
(1)www.southcom.mil/AppsSC/files/634038960550937500.pdf
(2)http://globalresearch.ca/PrintArticle.php?articleId=18241